LEIDY TATIANA BURGOS ORTIZ
Hablar de Neiva, es hablar más que de cualquier
ciudad, es hablar de un municipio que
hoy por hoy debe buscar convertirse en un espacio propicio para la convivencia
ciudadana, el trabajo, la justicia, la igualdad, la libertad, la paz, la
equidad, dimensiones que se deben cumplir dentro del marco jurídico y
democrático con la participación de toda la comunidad neivana.
Neiva 1612-2012, cuatrocientos años de historia, un
cuento que involucra muchas vivencias, cultura y tradiciones, realmente podemos
decir hoy los Neivanos una historia verdaderamente tejida a mano. Pero más allá
de estas historias que han construido ciudad, identidad y valores opitas, es
indispensables que en la celebración de un hecho histórico como la fundación de
Nuestra ciudad analicemos la Neiva actual y la que queremos para las
generaciones futuras.
No es raro para nadie ver como el terruño de los
opitas actualmente presenta un escenario financiero preocupante en cuanto a
insuficiencia de recursos una compleja situación de algunos sectores más que
otros, como son vías, seguridad, educación y generación de ingresos. Pero hoy
debemos saber que no podemos quedarnos en actitudes críticas y quejambrosas,
antes bien saber que dichos factores se atenúan con actitudes y acciones que
logren integrar un hecho significativo como es el tratamiento a través de una
lógica transversal, con el fin de optimizar recursos, físicos, humanos,
financieros y tecnológicos, al igual que garantizar la articulación de
políticas públicas Nacionales, Departamentales, Municipales y el desempeño
Institucional con propuestas complementarias de carácter sectorial en las que
estén involucrados los ciudadanos a través de espacios democráticos de
participación que permitan el aporte de estrategias para la ejecución de
programas de transformación de la ciudad.
Neiva además de ser la capital del departamento del
Huila, en Colombia y estar ubicada entre la cordillera Central y Oriental, en
una planicie sobre la margen oriental del río Magdalena, en el valle del mismo
nombre, cruzada por el Río Las Ceibas y el Río del Oro; es la principal ciudad
del suroccidente colombiano, ya que además de ser el puerto de conexión para
las ciudades capitales de Florencia, Mocoa, Popayán y Pasto, es el eje de la
economía de los departamentos del Huila, Caquetá y Putumayo.
Su área metropolitana posee una economía muy
dinámica basada en el ecoturismo, gastronomía, industria y comercio, es una de
las conurbaciones colombianas aún no oficiales pero existentes de facto en el
norte del departamento del Huila. Sus municipios satélites son Rivera, Palermo,
Tello, Baraya, Aipe, Villavieja y Campoalegre. Tiene según el último censo 481.159 habitantes.
Esta tierra de promisión tiene sus historias entorno
al origen de su nombre. Sostienen algunos que fue dado por los españoles, dada
su semejanza con algún lugar de Portugal o las Antillas. Sin embargo, al
parecer la palabra Neiva tiene un origen más universal: Neiva o Nieva, es el
nombre de un río en la Rusia Occidental. También es el nombre de una aldea de
Rusia, es el nombre de una aldea de Piamonte, el nombre de un río de Portugal
Naybe, significa culebra en lengua cuna, dentro de las crónicas de la conquista
se lee:
…hubo
un famoso valle cuyo señor se llamaba Neiva y Juan de Castellanos, el gran
cronista de la conquista huilense, escribe “al fin fueron a dar a las llanuras
Neiba que hallaron bien pobladas…”
También se asegura que los españoles le dieron este
nombre por su semejanza con el Valle de Neyba en Santo Domingo, igualmente en
su libro El Huila y sus Aspectos, el historiador Joaquín García Borrero sugiere
que el nombre de Neiva pudo provenir de Haití en donde los Españoles
encontraron un río que los naturales llamaban Neyve o Neyva.
Pero más allá de la toponimia de la que hoy
planteo, lo realmente importante destacar en nuestros tiempos es los factores
con los que cuentan actualmente los opitas, sus tradiciones, su cultura y sobre
todo la personalidad que han de servir como herramienta para la promoción del
cambio de la ciudad que queremos todos.
Pero el interrogante que surge en medio de todo es ¿CÓMO
QUEREMOS VER A NEIVA? ¿QUE HACER PARA LOGRAR LA NEIVA QUE LOS OPITAS SOÑAMOS?
A estos interrogantes considero que la visión compartida de todos los neivanos
ha de ser ver un municipio que propicie el desarrollo integral y sostenido,
contribuyendo a la formación solidaria, civilista, participante, con un alto
grado de responsabilidad social, respetuosa de la existencia del otro y de las
diferencias, como rasgos característicos de nuestra identidad cultural,
formación ética, moral y política. Un municipio, que en su integralidad a
corto, mediano y largo plazo, sea un espacio apropiado y dispuesto para la
competitividad y productividad, atractivo a la inversión y al turismo,
fundamentado en la transparencia y la equidad social.
Esa visión añorada de una Neiva futura solo es
posible en la medida que se garantice el desarrollo integral de los habitantes
del Municipio de Neiva, construyendo y asumiendo entre todos un compromiso
donde se invierta en el ser humano de manera que puedan acceder a mejores
oportunidades, aumentar sus expectativas de bienestar y calidad de vida;
reactivar la economía a partir de políticas públicas municipales con los
sectores productivo, industrial y comercial del municipio, con gobiernos
transparentes, incluyentes, sociales, solidarios, productivos, sustentables y
globalizados.
Lo que pretendo proponer para la construcción de la
nueva Neiva a través de este escrito, es una organización como un todo
coherente que articule varios elementos de una parte, una interpretación de la
realidad que vive el Municipio; una visión de cómo afrontar y solucionar los
problemas que nos aqueja; un pensamiento ciudadano que evoque la importancia de
elegir políticos con enfoque de Gerencia Pública. Básicamente considero que es
indispensable la realización de un gran proyecto de construcción de ciudad,
sociedad y democracia, capaz de interpretar la realidad y transformarla, que
sea un instrumento indispensable para realizar proyectos pluralistas,
incluyentes y democráticos, que permitan el avance estratégico hacia la
construcción de un municipio moderno, productivo, competitivo, atractivo a la
inversión, abierto y seguro, capaz de crear empleo y de generar desarrollo con
equidad social.
Se hace indispensable construir un compromiso de
todos donde se valore el ser humano de
manera que todos los habitantes puedan acceder a mejores oportunidades,
aumentar sus expectativas de bienestar y en últimas, mejorar la calidad de
vida, sin que se deje a un lado el trabajo conjunto con proyectos de impacto y desarrollo
urbanístico, la reactivación de la economía a partir de políticas públicas
Municipales de los gobernantes de turno con el sector productivo, Industrial y
comercial del Municipio, con un gobierno transparente, incluyente, social,
solidario, productivo, sustentable y globalizado. Para mí es vital reconocer que las acciones
deben encaminarse a soluciones y propuestas integrales, concretas y realizables
bajo las consideraciones y marco jurídicos en el tema de la inversión en los
ciudadanos.
Para ello, resulta importante conocer que Las
personas son la verdadera riqueza de un Municipio, con este principio se inicia
la construcción colectiva de nuestra Neiva, como una Neiva Humana,
Participativa, Solidaria, Productiva, Competente e Incluyente, ese
reconocimiento nos permitirá avanzar hacia una ciudad que sea capaz de
convertir en acciones concretas las necesidades esenciales para que todos
tengamos una vida digna. En conclusión es necesario velar incansablemente por
la población de todas las edades sin distingo alguno, teniendo como prioridades
capital humano, como receptor de la inversión social.
Igualmente se debe buscar crear las condiciones
políticas, económicas y sociales, para que Neiva responda con empuje y decisión
al imperativo de producir una recuperación económica que haga posible la
creación de mejores oportunidades para el desarrollo de proyectos productivos
con rentabilidad económica y excedentes sociales para la comunidad más
desprotegida y vulnerable. Para alcanzar este equilibrio económico y social que
garantice la mejor calidad de vida de nuestra comunidad y la rentabilidad del
gremio empresarial se requiere de la acción conjunta y mancomunada del
gobierno, la clase dirigente, los gremios económicos, el sector académico y
demás organizaciones de la sociedad civil en la búsqueda de alternativas
viables en el camino de la reactivación económica.
Pero dentro de tal proceso se hace indispensable la
participación comunitaria y la convivencia ciudadana pues son la columna
vertebral para la ejecución y seguimiento de las estrategias y proyectos que se
desarrollen. Esa participación se verá reflejada en la democracia que debe dejar de ser procedimental para
convertirse en auténtica de participación, con verdadero empoderamiento de la
sociedad civil. Se deben implementar modelos político y gerenciales, eficaces
para fortalecer con racionalidad política y administrativa, con participación
activa de la comunidad la creación de sociedad, ciudad y democracia. Solo en
esa medida la convivencia será concebida como la condición política y social
que posibilite la construcción colectiva de la paz, el fortalecimiento de una
cultura de valores de todos los Neivanos y Neivanas, para la construcción de
nuevas formas de relación social con criterio participativo y pedagogía social.
No debemos desconocer para la
Neiva del futuro la gestión ambiental y territorial pues esto es uno de los
grandes desafíos en la construcción de un Mejor Hábitat para nuestro municipio,
por considerar que la relación de la ciudadanía con su entorno natural y
social, define calidad de vida.
Finalmente considero que la Neiva que todos soñamos
está en nuestras manos, en la medida que elijamos gobernantes que desarrollen
programas que comprometan activamente el empoderamiento de todos los servidores
públicos de la administración municipal, la población civil y el sector
privado. Gobiernos que representen a todos los sectores, siempre abiertos y con
una concepción de la democracia que trabajen con criterios de eficacia,
eficiencia, celeridad y efectividad en la búsqueda de las mejores condiciones
para neivanos y neivanas.
El compromiso es de toda la comunidad debe nacer un
interés colectivo, que procure la construcción una ciudad sólida, educada,
libre de corrupción, lo que significará desarrollar gran confianza y generar de
esta manera una ostensible cultura envidiable a los ojos de ciudadanos
extranjeros y nacionales no pertenecientes a nuestra región.
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